Y para muestra basta un botón

22 noviembre 2007 | Published in | 0 comentarios

Siendo sincero, en estos momentos desearía introducir un post que englobe muchas de las ideas expresadas en todos mis comentarios anteriores, con el próposito de dar un giro al blog hacia un tema que deseo desarrollar con más profundidad: el de Ubuntu-es. Pero antes de que eso suceda, aprovecho para compartir una breve pero peculiar história. Se trata de Rubén, un chico de apenas 16 años de edad que es un vivo ejemplo de lo que es un hacker, y que contradice, por mucho, lo que los medios de comunicación nos quieren hacer creer sobre esta actividad.

Mercè Molist
Rubén Díaz es un ejemplo viviente de los nuevos cachorros de la red. Con 16 años, usa Linux, tiene su propio blog, participa en un sinfín de comunidades virtuales y puede pasar tranquilamente 12 horas seguidas ante el ordenador. Sus notas han decrecido a medida que aumentaba su pasión.

El apodo de Rubén en Internet es "outime" (fuera de tiempo). Y algo precoz sí es este chaval de Madrid: "No pienso en otra cosa que la informática. Desde que inicié mi primera aplicación, no he parado: programación, seguridad, redes. Apenas he necesitado ayuda, soy autodidacta gracias a los manuales que hay en la red". En contraste, sus estudios de ESO van fatal y tuvo que repetir el tercer curso porque le quedaron, dice, "muchas asignaturas".

A pesar de ello, cuenta con la simpatía de sus profesores: "Cuando estaba en sexto de Primaria, uno ya me llamaba, en broma, "hacker". Desde entonces me he ganado fama de "geek" y, en los siguientes cursos, cada vez que tocaba tutoría ya les habían hablado de que pasaba mucho tiempo delante del PC", explica Rubén, quien se siente apoyado: "Muestran interés por ver qué es lo que hago, incluso mi anterior tutora me pidió la dirección de mi blog para echarle un vistazo".

El primer ordenador de Rubén, un Compaq Presario con sistema operativo Windows ME, fue un regalo de Papá Noel cuando tenía 8 años. A los 9, entraba en Internet, en los chats, y allí le hablaron del "software" libre, que hoy defiende a morir: "Es el futuro. Está respaldado por una comunidad gigante siempre dispuesta a ayudar y es "software" de calidad. ¿Por qué depender de una empresa cerrada, que no muestra su código y cualquier día puede quebrar, quedándome sin sistema?".

Rubén usa la distribución más genuina de Linux, Debian, junto con Kubuntu, aunque empezó con otra, a los 11 años: "Mandrake, hoy llamada Mandriva. Fuí al Corte Inglés y la pedí. El dependiente frunció el ceño y me preguntó si estaba seguro de que era eso lo que quería. Solté todo lo que tenía ahorrado, sin saber aún que podía descargarlo por Internet gratuitamente".

Le costó alrededor de 8.000 pesetas: "Lo pagué con las propinas que me había dado la familia en Navidades y cumpleaños, ya que la paga no me llegaba. Desembolsé todo lo que tenía, pero salí más que contento. Después me desanimé, porque daba algunos fallos, más tarde probé una SuSE y también. Si por aquel entonces hubiera habido distribuciones como Ubuntu, me habría podido subir al tren mucho antes".

De esta afición surgió su blog: "120% Linux", para el que tiene su propio dominio y servidor. "Recibo correos diarios de felicitacion por el blog", se ufana y añade: "No lo hago por nada a cambio, la publicidad me da para pagar el servidor y nada más. Simplemente, me gusta el espíritu del "software" libre y quiero difundirlo. Es una experiencia realmente gratificante".

Antes tenía otro blog, alojado en WordPress, donde acabó siendo el administrador de los foros en castellano. Y es que el chaval no para: mantiene diversos webs y canales de chat relacionados con el "software" libre, es miembro de Hispalinux, la Free Software Foundation, el GNU Spanish Translation Team, es administrador de Menéame, tiene un canal en Youtube y ahora le ha dado por la radioafición.

Sus padres son permisivos, asegura: "Mi madre me apoya en lo que puede y, aunque se haga la remolona, siempre he podido disponer de un PC. Mi padre se mantiene un poco alejado de lo que hago, quizá piensa que no soy lo suficientemente responsable o le fastidie que me haya afectado a los estudios, aunque últimamente muestra algo más de interés".

Su hermano, de 26 años, paga la conexión a Internet, que comparten como años atrás compartieron su primer ordenador: "Él pasa bastante tiempo conectado, pero no le llama la informática como a mi, sino chatear y echar algunas partidas a juegos". Aunque Rubén no se tenga que preocupar de su acceso a la red, es muy consciente de la situación de la conectividad en España: "Somos el peor país de la Unión Europea en cuanto a calidad y precio, la banda ancha es cara, mala y no-universal".

Como buen aprendiz de "hacker", tan joven y ya con un móvil 3G para consultar el correo, se siente algo alejado de su generación, apasionada por los ordenadores pero a otro nivel: "Sólo juegan a videojuegos y pasan horas conectados en el Messenger, sin hacer nada útil y empeorando su ortografía. No se interesan más allá de eso. En el instituto me miran raro por no utilizar los programas que usa la mayoría. Saben lo que es Firefox, pero no el "software" libre".

En cambio, todos le piden que arregle sus ordenadores: "Ahora tengo un precio, me cansé de estar a pie de cañón sin recibir nada a cambio, como si estuvieras obligado. Con la excusa de "soy amigo", "soy familiar", "soy amigo del amigo", la gente se aprovecha. Cobro algo muy simbólico pero sirve para repeler a los que se tiran a tí cuando tienen el mínimo problema: virus cada dos por tres, la "cam" no me funciona, el ordenador va lento...".

Su precio es la voluntad que, asegura Rubén, suele rondar los 20€: "Siempre dependiendo de qué tipo de avería se trate, pero generalmente no es más que un simple formateo de sistema". Sus clientes son familiares y amigos de familiares. En el instituto, dice: "Soy reservado porque, en cuanto sabes de algo, no te van a dejar en paz". De esta forma, ha conseguido reducir notablemente las demandas de ayuda que "cuando lo hacía gratis, eran un par al día".

Rubén es una explosión de hormonas puestas a disposición de la comunidad internauta: "Hoy por hoy sigue sin abundar gente que a temprana edad ya maneje la informática pero se ha convertido en algo más habitual, debido a que Linux está al alcance de cualquiera, se nace con banda ancha bajo el brazo y tener un ordenador en casa no es tan extraño como antes". Aunque no se considera un genio, afirma: "Eso sí: soy muy 'friki'".


LOS CONSEJOS DE RUBÉN PARA METERSE EN EL UNIVERSO LINUX

1. "Primero de todo, paciencia. Si bien GNU/Linux es más fácil que en otras épocas, un cambio en cualquier sentido supone un esfuerzo y paciencia para adaptarse".

2. "Pensar siempre que es una alternativa, no sentirse obligado, hacerlo poco a poco, buscando aplicaciones que se adapten a nuestras necesidades".

3. "No desanimarse al primer fallo, porque ni GNU/Linux, ni Windows, ni Mac, ni ningún sistema es perfecto. No es la primera vez que veo a gente que quiere migrar pero encuentra un sólo fallo y tira la toalla, cuando estaba acostumbrado a aguantar todos los días veinte fallos en su otro sistema".

4. "Instalarse una distribución como Ubuntu, ya que trae preinstaladas todas las aplicaciones básicas: OpenOffice como procesador de textos, Gaim para mensajería instantánea, Firefox como navegador. Además, encontrar "software" es mucho más sencillo que buscarlo para Windows. No hay que ir a ningún web, sólo ejecutar el gestor Synaptic, buscar el programa deseado, descargarlo y se instala automáticamente".

5. "Participar en listas de correo y foros de ayuda sobre "software" libre. En el 95% de los casos, allí se encuentra solución a los problemas habituales, a no ser que se haya encontrado antes en Google".


120% Linux
http://120linux.com


Copyright 2007 Mercè Molist.
Verbatim copying, translation and distribution of this entire article is permitted in any digital and no commercial medium, provide this notice is preserved.

Disponible en: http://ww2.grn.es/merce/2007/ruben.html

Responses

Leave a Response